Nueva edición de ciclo de coloquios contó con la participación de docentes de la Facultad de Estudios Teológicos y Filosofía, así como de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales.
Distintas visiones sobre libertades y nueva Constitución ofrecieron académicos de la Universidad que participaron en el quinto encuentro del ciclo de coloquios organizado por la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio de la UCSC, con el propósito de aportar al debate y formación ciudadana en el marco del proceso constituyente.
Los participantes de la jornada fueron: Carolina Lagos y Rodrigo Colarte de la Facultad de Estudios Teológicos y Filosofía, así como Marco Rojas y Fernando Gutiérrez de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales.
En su exposición, Rodrigo Colarte señaló que desde la concepción cristiana del hombre, el ser humano se caracteriza sustancialmente por poseer tres facultades que ningún otro ser natural posee: inteligencia, voluntad y libertad. “En el campo ético se suele afirmar que cuando estas tres facultades concurren en una acción concreta estamos frente a un acto humano voluntario, es decir, una acto del que podemos y debemos hacernos responsables”.
Asimismo agregó que serán el Estado y sus leyes las que organicen parte relevante de la vida humana en sociedad y que los derechos aparecen como un coto frente a la presión que este ofrece. “El Estado, por tanto, debe reconocer la libertad de culto, de expresión, de educación, económica, es decir, debe asegurar las diferentes libertades para tener una sociedad libre”.
Por su parte, Marco Rojas sostuvo que el proceso de demandas del último tiempo apunta a desigualdades que se expresan en la vida cotidiana de los chilenos y que, en ese sentido, están asociadas a los conceptos de ciudadanía social moderna y de justicia social.
“Si hablamos de esta última hay dos elementos fundantes que son la igualdad y la libertad, los que están en interacción permanente y son mutuamente dependientes. No podemos hablar de libertad a secas sin considerar la igualdad como un elemento que le condiciona y le determina. Por eso, hay que ser conscientes de que para construir un nuevo proyecto de sociedad se deben compatibilizar ambos elementos”.
La libertad de información fue abordada por el académico, Fernando Gutiérrez, quien afirmó que el acceso y transmisión informativa es una garantía frente a un proceso que debe ser participativo y conocido por todos, pero que también genera la circulación de todo tipo de datos, que en lugar de informar podrían generar un extravío informativo, donde los cuestionamientos abundan, así como la polarización, la duda, el rechazo, la incerteza y la violencia.
“El libre ejercicio del derecho a la información es, por tanto, garantía del derecho a la libertad y de la libertad en el ejercicio de los Derechos Humanos fundamentales o naturales. No puede afirmarse que el derecho a la información sea el único garante de la libertad, pero sí decirse que, siendo una de tantas, es una garantía indispensable”.
De igual modo, llamó a preguntarse cuál es la importancia que como sociedad se le atribuye a la información, en tiempos donde su uso malicioso puede provocar más daño del que se puede imaginar al expandirse sin filtro y convertirse en un arma con un poder destructor poderosísimo.
La última exposición del encuentro estuvo a cargo de Carolina Lagos, quien abordó el valor de la libertad religiosa en las sociedades democráticas. “Esta libertad es una contribución real para el ejercicio de la democracia y el desarrollo de normas públicas. La religión posee un corpus de valores y principios que informan de manera sustantiva al sistema democrático. Por lo tanto, en el presente las religiones aparecen como componentes legítimas de la sociedad civil y, por lo tanto, son libres de manifestarse públicamente”.
A ello agregó que la libertad de las creencias religiosas es un requisito básico para toda sociedad democrática que considera a sus ciudadanos como sujetos responsables de concretar sus decisiones personales y sociales.