El diccionario de la Real Academia define “inconsciencia” como la falta de juicio, sensatez y cuidado que una persona demuestra en sus acciones. Esta semana comenzó con bombos y platillos la Semana de la Ciencia en Chile con diversas actividades en cada una de las regiones del país. Esto es supuestamente para mostrar la relevancia de las ciencias como factor clave en el desarrollo de nuestra cultura, sociedad y país. Al mismo tiempo, nuestros honorables parlamentarios discuten en el congreso la ley de presupuesto para el próximo año. ¿De qué sirve tener batucadas, laboratorios al aire libre, mostrarles a los niños lo interesante y necesario de conocer y entender el mundo que nos rodea, si el presupuesto del próximo año para CONICYT, principal entidad pública encarga de concretar las políticas en ciencias, es podado a su mínima expresión?
Un análisis realizado por la Dirección de Investigación de la Universidad de Chile* muestra que el crecimiento en el presupuesto de CONICYT para el año 2014 será de 3.3% (265.610 M en el 2013 a 274.479 M para el año 2014), lo que si se descuenta la inflación proyectada, muestra un estancamiento en el crecimiento. Sólo para dar un ejemplo, uno de los ítems que presenta mayor incremento será el del concurso de proyectos FONDECYT (16.3%), uno de los principales fondos para ciencias, en desmedro de por ejemplo FONDEQUIP (-14.5%), que permite implementar laboratorios con altas tecnologías. Aunque pareciera un aumento importante para FONDECYT, las estimaciones realizadas en el estudio muestran que descontando los montos comprometidos para continuidad de los proyectos FONDECYT en ejecución actualmente, en sus concursos de Regular, Iniciación y Post-doctorado, la cantidad de proyectos nuevos a financiar bajarían a casi la mitad en comparación al presente año.
Vemos declaraciones por todos lados que las ciencias son importantes para el desarrollo del país, mientras se reducen los fondos para tener más investigadores realizando ciencia; declaramos que la tecnología es motor clave para salir del subdesarrollo, mientras uno de los principales fondos para que las universidades y centros de investigación adquieran equipos de tecnología compleja y de alto costo, se reduce significativamente. Parce que la “incons-ciencia” seguirá primando en nuestras autoridades de gobierno, mostrando una vez más nuestra bipolaridad como sociedad, al prender velitas a los santos mientras los desvestimos. Como sabemos, nuestros parlamentarios se tomarán un descanso legislativo antes de discutir la ley de presupuesto, ya que por ahora es más importante salir a buscar los votitos. Espero que vuelvan “con-ciencia”.
* Análisis del proyecto de ley de presupuesto 2014 CONICYT. Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo Dirección de Investigación. Universidad de Chile.
Dr. Antonio Brante
Jefe Depto. Ecologia
Facultad de Ciencias
Universidad Catolica de la Ssma. Concepción